Cómo saber qué tipo de piel tengo y cómo tengo que cuidarla
Seguro que te ha pasado: intentas definir tu piel y no lo tienes claro
Unos días dirías que es "seca", otros "mixta" (por esos brillitos que de repente ves en la zona de la frente) y otros, incluso, "grasa" o "sensible".
Skin Coach, la tecnología que estabas esperando
‘¿Cómo saber qué tipo de piel tengo?’, es la pregunta del millón. Identificar nuestro tipo de piel a veces puede convertirse en una tarea complicada ya que, aunque en buena parte viene predeterminado por nuestros genes, hay agentes externos como las temperaturas extremas, la contaminación o el cambio de maquillaje (incluso de tratamiento facial), que quizás tengan efectos puntuales sobre la misma.
Si eres de las personas que piensan que todo esto resulta una misión imposible, Garnier ha preparado una herramienta digital que te alucinará, porque con SkinCoach podrás saber, ¡por fin!, cómo es tu piel y cómo debes cuidarla para que esté luminosa y uniforme.
Se trata de una inteligencia artificial de diagnóstico facial que analiza cinco aspectos del cutis: luminosidad, firmeza, poros, textura y uniformidad. La tecnología SkinCoach es fruto de 20 años de investigación y proporciona una práctica rutina de cuidados para que tu piel esté tan saludable e increíble como tú quieres.
¿Estás preparada para saber qué cuidados precisa tu piel de una vez por todas? Recuerda tomarte tu tiempo y no saltarte ningún paso:
- Lávate bien la cara. Un día que estés en casa y sepas que no vas a salir en unas horas lava tu rostro suavemente con agua y gel facial para eliminar las impurezas. ¡Aunque no las veas, están ahí!
- Sécala con la toalla a golpecitos. No frotes, ni restriegues al secar o podrás provocar enrojecimientos puntuales que afecten el resultado.
- No apliques ningún producto y espera media hora. Es el tiempo que necesita tu piel para recuperar su estado natural.
- Coge tu móvil y abre la herramienta SkinCoach. Escanea el código QR que aparece en la página y… ¡ya estás lista para identificar las características de tu piel!
Por otro lado, a continuación, te presentamos una completa guía que te ayudará a saber cómo es cada tipo de piel y qué tipo de productos van con cada una de ellas. ¡Adelante!
¿Cómo saber qué tipo de piel tengo? Piel seca
La piel seca es consecuencia de una insuficiente producción de lípidos que necesita la epidermis para estar hidratada. Uno de los grandes problemas de esta piel es que las líneas de expresión y las arrugas aparecen antes de tiempo.
Características de la piel seca
- Poros cerrados.
- Opaca, áspera y quebradiza.
- Tendencia a tener descamaciones, rojeces y sensación de irritación.
- Incomodidades y sensación de picor debidas a la sequedad.
Además de los factores internos, también hay elementos externos que pueden perjudicar a las pieles secas, como son los cambios de temperatura extremos, el viento o las radiaciones del sol.
Cuidados de la piel seca
- Hidratación. Necesita, más que ninguna otra, los famosos 2 litros de agua al día.
- Alimentación equilibrada.
- Evitar la exposición solar prolongada y usar cremas de alta protección.
- No utilizar agua muy caliente.
Tratamiento recomendado
El Agua Micelar desmaquillante para pieles secas es perfecta para ti. A la eficacia del agua micelar se une la hidratación de la leche limpiadora, lo que la convierte en un poderoso tándem que hidrata y limpia tu rostro en un solo paso.
¿Cómo saber qué tipo de piel tengo? Piel grasa
Quienes tienen la piel grasa, padecen de un exceso de sebo. Puede estar producido por componentes genéticos y emocionales (como el estrés) pero, sobre todo, por factores hormonales, por lo que suele darse más en la adolescencia.
Características de la piel grasa
- Aspecto brillante y tacto aceitoso.
- Poros dilatados con granitos y puntos negros.
- Textura irregular.
El principal inconveniente de las pieles grasas es la aparición de brillos e imperfecciones como granitos o puntos negros. Eso sí, esa producción de grasa resulta, a la larga, una ventaja para la epidermis que envejece más lentamente. Además, es más fuerte frente a los factores externos como el frío o el viento.
Cuidados de la piel grasa
- Limpieza diaria para que los poros no se obstruyan.
- Exfoliar la piel una vez por semana para eliminar impurezas.
- Nunca manipular las espinillas y los puntos negros con las manos.
- Alimentación equilibrada.
Tratamiento recomendado
Evita los productos cremosos o grasos. Opta por hidratantes ligeras y ricas en extractos vegetales como el té verde, incluido, por ejemplo, en el Hidratante Matificante Botánico con Hoja de Té Verde. Su fórmula reequilibra la piel y la matifica, así que ¡adiós brillos!
¿Cómo saber qué tipo de piel tengo? Piel sensible
Es reactiva y reacciona negativamente a los factores que, en otros tipos de piel, no producirían ningún efecto. Resulta especialmente sensible a la radiación solar, a las temperaturas altas y bajas, … incluso a la alimentación. Por ello, necesita cuidados específicos.
Características de la piel sensible
- Es fina, clara y tiene tendencia a descamarse.
- Tendencia a rojeces y sensación de irritación.
- Incomodidades y sensación de picor.
- Se siente tirante.
- Reacciona ante los factores externos.
Hay muchos grados de sensibilidad, y por eso debes tener cuidado a la hora de elegir tus productos.
Cuidados de la piel sensible
- Cuando se lave, secar la piel con cuidado, nunca frotando con la toalla.
- No usar tejidos sintéticos ni lana pues producen reacciones en la piel.
Tratamiento recomendado
Mantén la piel hidratada. Prueba la fórmula del Hidratante Calmante Botánico con Agua de Rosas, pensada para calmar la piel sensible y reducir su tirantez.
¿Cómo saber qué tipo de piel tengo? Piel normal
Sí, lo sabemos, la palabra ‘normal’ es demasiado general y vaga. Pero cuando hablamos de piel, nos referimos a una epidermis equilibrada, en la que los niveles de grasa e hidratación están compensados. De manera más técnica, se la conoce como piel eudérmica.
Características de la piel normal
- Poros pequeños y cerrados.
- Aspecto suave y uniforme.
- Tono rosado y fresco.
No es muy común así que, si eres de los pocos afortunados que la poseen, ¡enhorabuena! Eso sí, ten claro que, aunque no requiere tantos cuidados como otros tipos de pieles, eso no quiere decir que no se deba limpiar y nutrir como es debido.
Cuidados de la piel normal
- Limpiar, tonificar e hidratar a diario.
- Exfoliar suavemente para eliminar impurezas una vez por semana.
- Utilizar protector solar.
- Usar una crema para contorno de ojos.
Tratamiento recomendado
Aplica cremas hidratantes y nutritivas para favorecer los procesos naturales de regeneración de la piel. La Hidratante Refrescante Botánico Savia de Aloe mantiene la piel hidratada durante 48 horas y te deja una sensación refrescante que ¡te volverá adicta!
No hay ninguna duda, para cuidar tu cara y tu cuerpo con el tratamiento adecuado es indispensable saber responder a la pregunta ‘¿cómo sé qué tipo de piel tengo?’. Con esta completa guía y la ayuda de la tecnología SkinCoach, mimar tu piel como se merece es mucho más sencillo de lo que imaginas.